Cerré mis ojos, ore para entrar en meditación y escuche una canción, un himno, con estas letra;
‘Jesús está buscando voluntarios…».. y mientras continuaba ese canto, Entonces, vi una flor frente a mi.
De repente, vi a Jesus que venía corriendo, con muchísimo entusiasmo y hasta se tomó sus faldas y saltó una cerca de madera que yo había yo visualizado previamente, entonces, tomó mi mano y dijo con entusiasmo;
«Ven conmigo quiero ensenarte algo», le vi como con ropa de trabajo, ósea sin bufanda de color solamente una bata blanca mas corta y solo un cinturón de Cuero.
A lo lejos, mientras corríamos podía divisar un pasillo rústico, hecho de pedazos de madera por debajo de una sombra de árboles. Primero, dudé si seguir corriendo o no hacia allá. Entonces voltee para ver si tenía angeles protectores a mi lado y corriendo aun me dijo Jesús «Si, yo soy Jesús el Nazareno» y se detuvo, y se inclinó hacia mí como se inclinan los adultos frente a los niños y con una sonrisa dijo, «Dime, cuántos ángeles quieres? y los tendrás, voltea»
Voltee y vi un sin número de ángeles con ropas de trabajo, unos con alas otros sin alas, y continuó diciendo «quiero mostrarte algo».
Subimos entonces hacia una colina que tenía un gran árbol en el tope. A Través de toda la Colina, habían niños de todas las razas sentados en la grama entretenidos con papeles en frente ellos y como con creyones de colores.
Entonces dijo Jesus con tanta alegría, «Miralos, los tengo trabajando!, qué te parece?» y asombrada antes de emitir alguna palabra continuó diciendo » ¿Ves esa mesa?, quiero que TU los enseñes» y había una mesa de madera frente a ellos y le dije, ‘Yo?, a pintar? ¿Qué les voy a enseñar? y continuó, «TU Los enseñaras»
Y apuntando hacia la mesa dijo, «esa mesa es para ti, ¿ves? Y tienes un vaso para tu agua y todo lo que necesitas está allí», «anda, mira el papel sobre la mesa» y me acerque a la mesa y vi que tenía un barco velero dibujado en el papel muy parecido a la imagen del barco que había visto en meditaciones anteriores y le dije, -«Quieres que les enseñe a dibujar?-no contestó, solo estaba agachado sonriendome y levantaba sus cejas esperando una respuesta de mi . Vi entonces una oveja caminando por allí.
Le pregunté, » ¿Quieres que me vaya a algún otro lugar a enseñar?» y alzaba las cejas y con una expresión de entusiasmo dijo ‘qué te parece?’ y le respondí, «Señor, si me envías algún lugar me gustaría llevarme a mi esposo conmigo» y moviendo su cabeza y sus hombros con un gesto de aprobación solo sonreía.
El estaba muy feliz y que dijo más cosas de las que no tengo memoria, solo recuerdo que mientras me hincaba y oraba él continuaba diciéndome cosas, yo le oraba pidiendo por la lista de oración de las personas que podía recordar en ese momento, y al terminar de orar le dije, ‘Sr Jesus, no me acordaré de nada de lo que me estás hablando”- y respondió Jesus, » Ya te dije, que no te preocupes, que todo vendrá a su tiempo».
Dude de la visión por un segundo, pues no creí merecer ver a Jesus y le pregunte como preguntar a cualquier otro guía en mis meditaciones, –«tienes algún regalo para mi?» y casi con lágrimas en su rostro me dijo,
«Qué te parece la vida eterna?, es suficiente?» me cuestioné si acaso yo era merecedora de la vida eterna. En ese momento sentí lágrimas en mi rostro y supe que SI era Jesús mi maestro mi salvador.
Le pregunté a Jesus, si ese era el día indicado para asistir a una amiga que Él mismo me pidió que fuera hacerle una sesión de sanación intuitiva o Reiki, pero yo no estaba segura si ese era el día.
Y respondió diciendo, «todo lo que salga de tu corazón, será para bien y yo estaré contigo en cada sesión, ten fe»
Y sentí una inmensa paz en mi cuerpo. Gracias Dios, gracias mil.