Agosto 16- «Ofreceras ofrenda de sacrificio a tu creador»

Al cerrar mis ojos vi un simbolo cuadrado dentro de otro cuadrado,  parecia griego.  Tambien vi como el cuello de una vestimenta especial, muy bien elaborado.

Esta vez, senti que yo sali de un portal y vi a quien de una vez reconoci como, Moises  y esta vez se veía no tan de {edades como la vez que lo vi en otra meditación.  El estaba parado esperandome, listo, presto, eso sentí.  Estaba parado sobre una roca pequena y sostenia en su mano izquierda, las tablas de los mandamientos y en la derecha su callado de madera. Al poner mis pies afuera escuche la voz de Jesus que dijo “Estoy contigo”.

Sin dudar segui a moises que se veia contento y sonriendo, toco la arena con su callado y la arena se convirtio en mar y se abrio en 2 paredes de agua dejando un camino, como en su tiempo.

Al ir caminando note que Jesus caminaba tambien detras de mi era un Jesús un poco mas pequeño y con un halo dorado en todo su cuerpo.  Mientras tanto Moises dijo, “tendras que ofrecer sacrificio de ofrenda  creador”  su expresión facial, indicaba que yo debía YA saber eso.  Y le pregunte, “que ofrezco”, y contesto,” lo que tu mas valoras.”

Al llegar al final del pasillo de agua vi un arbol que tenia una vaca amarrada, cuando nos acercabamos mas vi un altar, note que el sacerdote Melquicedeck estaba esperandonos con un ropaje para ritos sagrados y un sombrero alto.  Mientras nos acomodábamos alrededor del altar moises se acerco para sacrificar la vaca me dijo, “tendras que ofrecer, ofrenda de sacrificio al creador” y le insisti “que ofrenda” y contesto

‘tu tiempo”.

Vi una imagen, una  bandeja rectangular con aguas revoltosas. También, note que tenia en mi mano, la antorcha que Moises me dio en una meditación de Agosto 12.   Encendimos con fuego el altar al mismo tiempo.

Le pregunte a Moises sobre la meditacion anterior que significaba lo que me dijo de ‘mis verdades’ y me contesto “Jesucristo escribio su nombre en tus manos y en tu corazon”.

Note, que al terminar el sacrificio, otro Jesus estaba debajo del arbol era mas alto, tenia una corona brillante en su cabeza y capa roja observando y se pusieron a conversar el sacerdote Melquicedeck y el.  Voltee para ver el camino y me vi como en el aire y desde arriba note que las paredes de agua, en su cresta, formaban el busto de un hombre con largas barbas.

Al salir de la meditacion me puse a orar por Korea del Norte y vi el sombrero con una cruz catolica. Cuando chequee en el internet me entere que el papa Francis estaba visitando Korea del sur.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *